Resiliencia Parte 2
“A donde vayas, ve siempre con todo tu corazón”, Confucio.
En esta segunda parte de “Resiliencia” abordaremos puntos clave para tener mayor confianza y seguridad en uno mismo.
Como adultos, es para nosotros fundamental que nuestros alumnos, hijos, conocidos o familiares tengan una vida llena de momentos de alegría y felicidad, a pesar de las adversidades. Por eso, si queremos hijos resilientes debemos comenzar por nosotros mismos para transmitírselo a ellos.
Te compartimos algunas acciones que puedes practicar para desarrollar la resiliencia:
- Ámate y confía en ti.
- Ofrece momentos de cariño, ternura y protección a tus seres queridos, especialmente a tus hijos.
- Ten personas de confianza para hablar.
- Socializa a través de la empatía y la asertividad.
- Aprende cosas nuevas.
- Realiza actividades de altruismo.
- Ríete, el humor ayuda a transformar el sufrimiento y dejar de ser víctimas.
Ante una situación de agonía, dolor o sufrimiento, incluso sentirnos muy cerca de la muerte, el efecto resiliente nos permite sentirnos seguros y protegidos para continuar con la vida, y nos transforma para mejorar y disfrutar.
